Es un conjunto de habilidades y técnicas, desarrolladas y encaminadas para repeler una agresión, para defenderse y salvaguardar la integridad física personal o de alguna otra persona en situación de peligro por una agresión.
Una persona puede defenderse de una agresión usando palos, gas pimienta, taser, armas blancas, armas de fuego o a mano libre, e incluso recurrir a objetos que no están diseñados para ello pero que por su constitución pueden ser utilizados como unas llaves, la hevilla de un cinturón, una revista o cualquier medio propicio para usar como un arma intermedia para ello es necesario contar con los conocimientos básicos sobre técnicas de defensa.
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